Saludable cambio de rumbo 26.09.16
“Lo que hay en el Perú, se dice, es un club de constructores que se distribuyen las grandes obras del Estado.”. Incluso entre ellos comentan “Las carreteras te tocan a ti, después me tocan a mi, etc. Eso es lo que hay que investigar. Este es el verdadero Lava Jato en el Perú (1). Se tiene que investigar .”
La anterior frase no fue expresadas por algún crítico antisistema, sino que la denuncia fue efectuada por PPK durante la última campaña electoral.
Sin embargo una vez elegido Presidente tuvo un cambio de 180 grados. Es así que en más de una oportunidad ha fijado posición respecto a que “no perderá el tiempo “ investigando al gobierno de Humala. Asimismo, tanto el Premier Zavala como el congresista Bruce han expresado puntos de vista similares. El caso del ministro de energía fue todavía más claro en una entrevista a Gestión del 11.08.16. Al preguntarle si cuando se conozca el nuevo socio mayoritario del consorcio del Gasoducto Sur Peruano (los que comprarían el 55% de Odebrecht) , si el gobierno plantearía cambios en el esquema de ingresos garantizados vigente (que es el que origina los inmensos subsidios que entregarán los consumidores) , el ministro Tamayo se limitó a responder “ No he escuchado que se esté buscando desde el punto de vista del Gobierno mayores cambios”. Inclusive se argumentó que “la ley no permite hacer otros cambios, más que de operatividad y bancabilidad”. En realidad no hay ninguna “Ley” que impida los cambios. Sí existe el DS 410-2015-EF, que establece que durante los 3 primeros años de concesión solo se permite que se efectúen cambios relativos a la corrección de errores materiales; al cierre financiero y a ciertos aspectos operativos. Inclusive estos cambios fueron impulsados desde el gobierno, no por los concesionarios. Por lo que frente a la magnitud de los problemas que se presentarían, el Gobierno debería modificar el DS 410 a fin de posibilitar una renegociación bilateral y una disminución de los irracionales niveles de subsidio pactados. Tan es así que el ministro Thorne ha anunciado que se negocia mejorar las condiciones económicas de las concesiones del Gasoducto Sur Peruano , Chincheros , el aeropuerto Jorge Chávez y la Línea 2 del Metro.
Es saludable el cambio de rumbo de parte del gobierno en relación a los megaproyectos. Y , según lo anunciado, parece que no solo se renegociarían aspectos formales, sino también temas de fondo. Es así que en el caso de la Línea 2 del Metro se plantearían cambios tan importantes como modificar el diseño del proyecto, planteando que el tren ya no sea subterráneo entrando al Callao.
Esperemos que esto sea así en los demás megaproyectos que lo ameriten, como es el caso del Gasoducto Sur Peruano. Es que tiene un ducto de 32” que llegaría hasta Mollendo, con una capacidad de 1,500 mmpcd (millones de pies cúbicos al día); pero del que , en el mejor de los casos, solo se utilizarían 500 mmpcd . Por lo que se debería de plantear, por ejemplo, que el costo total del GSP se divida entre 1,500mmpcd y no sobre 500. Que la tarifa sea calculada con 1,500mmpcd y garantizar solo 500mmpcd .Si los concesionarios creen que hay más demanda, como afirman, que se arriesguen también ellos. Y si en el futuro se aumentara la capacidad instalada , se incrementaría la anualidad a otorgarles.
De otro lado el Congreso también tiene una importante labor fiscalizadora en estos temas, sobre los cuales ya se están empezando a adoptar importantes decisiones. Sin olvidar que la sociedad civil también estará pendiente del desarrollo de los acontecimientos.
Por lo que considerando que tanto concesionarios como el gobierno tienen aspectos de los contratos originales que consideran que deben de renegociarse, esperamos que esta inédita oportunidad que se presenta no sea desaprovechada por las autoridades , y de esta manera evitar significativos problemas futuros.
(1) Subrayado nuestro