No vale arrugar. O tu reputación o tu respuesta a la minería ilegal.
Mientras ayer cientos de mineros ilegales marchaban por el centro de Lima, pidiendo por enésima vez una prórroga a su formalización -lo que en buena cuenta es un pretexto para no formalizarse- otro movimiento llamado “No vale Arrugar”, dirigido a quienes toman las decisiones en el país, empezó a agitar las redes sociales pero con un efecto que superaría los likes facilistas o las protestas en el muro de Facebook sin pisar la calle.
Queda claro que la reputación no es ni online ni offline, hay una sola y la puedes impactar por cualquier medio. Y, efectivamente, a ello apela la campaña “No se vale Arrugar”, que a través de un video con argumentos contundentes y bien producido, nos lleva a no solo elevar una protesta en la red, sino en “tocarle la puerta” a las autoridades del gobierno, partidos políticos o empresas que consideremos tienen una responsabilidad con esta actividad extractiva que destruye nuestro medio ambiente.
Al momento de preparar este Café, ya eran 915 personas las que efectivamente habían mandado un mensaje desde la plataforma del movimiento, manifestándose y convocando públicamente a alguna personalidad política o empresarial en Twitter, esperando una respuesta.
Principales influenciadores de la campaña, según www.keyhole.co
¿Dónde está el compromiso?
Lo más interesante de esta acción social, es que las entidades a quienes la comunidad involucre, se verán comprometidas a responder ya que públicamente se sabrá que la comunidad espera una respuesta. El silencio público no favorecerá su “natural” postura en contra de la Minería ilegal, pero como es de esperar, no bastará con un “¡Protesto!” ya que teniendo un poder de decisión con impacto en el país, las acciones deberían ser la verdadera respuesta.
Según www.keyhole.co, estás son las cifras que demuestran el gran impacto de la campaña en menos de 2 días. Un alcance considerable, y una conversión que se registra en el sitio web oficial.
Un know how que puede llegar a otros sectores.
He visto innumerables protestas contra realities llamados “programas basura” que hasta recolectan firmas esperando un cambio. Cafeteros, ese cambio no se dará, siempre que los medios de comunicación vean a “Esto es Guerra” o “Combate” como un gran negocio, y lo es. Lo es porque hay alto rating y trae auspiciadores. Contra el rating no podemos luchar, hay gente que le gusta estos programas y punto, pero a los auspiciadores sí les puede impactar que su reputación esté expuesta, si hay un gran número de personas que demandan una reacción en las redes sociales, donde las marcas siempre tendrán un discurso feliz y de maravillas. ¿Qué pasaría si un tuit de promoción de una marca es respondido públicamente por una comunidad que le pregunta por qué auspicia determinado programa?
Ojo que ya hay precedentes de activaciones en Internet que lograron sacar un programa de alto rating del aire. Mi buen amigo Pablo Herreros desde Madrid, a través de una plataforma de firmas, expuso a todos los auspiciadores del cuestionado programa “La Noria” y luego, uno a uno, fueron abandonando el programa hasta que salió del aire.
Mi conclusión
Felicito la iniciativa de “No vale Arrugar”, más allá del objetivo que muchos compartimos, el cómo está usando la plataforma online, le da a esta campaña un potencial efectivo porque compromete la reputación de quienes dicen defender nuestros intereses, pero solo “dicen” pocas veces “ejecutan”. Si leen el artículo de hoy en Gestión, verán que ya el Congreso está cediendo frente a los mineros ilegales. Señores “padres de la patria”… NO VALE ARRUGAR.