Avances y en la construcción de ciudades sostenibles
Por: Mary Mollo Medina. Profesora de la Universidad ESAN. Experta en Gobierno, Política Pública y Gestión del Conocimiento.
En un mundo donde las ciudades representan menos del 2 % de la superficie terrestre, pero consumen el 78% de la energía global y generan más del 60% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), la sostenibilidad urbana se vuelve una prioridad crítica. Conscientes de este desafío, el Ministerio del Ambiente del Perú (Minam) ha lanzado un proyecto integral para promover ciudades más sostenibles en Lima y Callao, abordando la gestión del agua, los ecosistemas, la biodiversidad y la ecomovilidad.
Este proyecto se centra en el desarrollo de una plataforma de información avanzada que facilitará el planeamiento urbano y la toma de decisiones para la gestión del territorio. La plataforma ofrecerá una visión comprensiva de los problemas y oportunidades en la gestión urbana, convirtiéndose en una herramienta esencial para la formulación de políticas más efectivas y basadas en datos precisos.
La colaboración entre el Minam y la Universidad ESAN, una de las instituciones académicas más prestigiosas en Lima y Latinoamérica, es clave para el éxito del proyecto. Esta alianza no solo fortalece la gobernanza y la capacidad técnica, sino que también asegura que el proyecto esté bien fundamentado y alineado con las mejores prácticas y estándares internacionales, ya que en este esfuerzo está el GEF, El BID y el WWF.
El proyecto se expandirá en una segunda etapa para incluir a las ciudades de Huancayo e Ica, extendiendo así los beneficios de la gestión territorial avanzada y un enfoque integral en sostenibilidad urbana a más regiones del Perú.
La gestión de ciudades sostenible es parte de un tablero de interacciones y relaciones sistémicas que vinculan a los ODS:
El ODS 11 propone acción sobre ciudades y comunidades sostenibles es fundamental no solo por sus objetivos específicos, sino también porque actúa como un nexo para abordar las brechas y desigualdades presentes en otros ODS de la Agenda 2030. La sostenibilidad urbana impacta directamente en los siguientes objetivos:
- ODS 1 (Pobreza): Una urbanización bien planificada puede reducir la pobreza al garantizar acceso a vivienda y servicios básicos, además de fortalecer la resiliencia ante el cambio climático.
- ODS 2 (Hambre cero): Las ciudades pueden apoyar la seguridad alimentaria y el desarrollo local mediante la conexión urbano-rural y el uso de materiales locales en la construcción.
- ODS 3 (Salud y bienestar): Mejorar la calidad del aire y crear corredores verdes en áreas urbanas contribuye a un entorno más saludable.
- ODS 4 (Educación de calidad): La accesibilidad a instalaciones educativas de alta calidad en todos los niveles es crucial para el desarrollo.
- ODS 5 (Igualdad de género): La planificación urbana debe asegurar el acceso igualitario a espacios públicos seguros e inclusivos.
- ODS 6 (Agua limpia y saneamiento): Garantizar el acceso equitativo al agua potable y servicios de saneamiento es esencial.
- ODS 7 (Energía asequible): La planificación urbana sostenible debe incluir eficiencia energética y acceso a servicios energéticos modernos.
- ODS 9 (Industria, innovación e infraestructura): Desarrollar infraestructuras resilientes y sostenibles es crucial para el crecimiento urbano.
- ODS 12 (Producción y consumo responsables): Fomentar la economía circular y reducir desechos mediante una adecuada gestión urbana es esencial.
- ODS 13 (Acción por el clima): Fortalecer la resiliencia al cambio climático y mitigar sus efectos es una prioridad.
- ODS 16 (Paz, justicia e instituciones sólidas): Estrategias para ciudades más seguras fomentan la convivencia y la justicia.
- ODS 17 (Alianzas para lograr los objetivos): La colaboración entre sectores es crucial para el éxito de los ODS.
La vulnerabilidad y el riesgo de desastres como los riesgos climáticos aumentan en territorios donde la planificación del uso del suelo y su administración carecen de los instrumentos de gestión adecuados y de tomadores de decisión capacitados. Asegurar una implementación efectiva y sostenible de los proyectos requiere un esfuerzo compartido y una fuerte voluntad política.