Sistema de Pensiones Privado en el Perú: 32 años de existencia
Por: Jorge Guillén. Profesor Asociado de ESAN Graduate School of Business,
En el Perú, el Sistema Privado de Pensiones (SPP) ha tenido diferentes reformas a lo largo del tiempo. Todas ellas han tratado de aumentar cobertura y reducir las comisiones con la finalidad de garantizar un sistema previsional que permita mejorar las pensiones del afiliado, incrementar el ahorro nacional y por consiguiente la inversión. El SPP no solo administra el ahorro previsional, sino que genera un efecto multiplicador en la economía a través de su aporte al ahorro y las inversiones en infraestructura a través de las Asociaciones Públicos Privadas (APPs). Muchas de las obras que usamos en el sector público vienen de financiamiento del SPP. Estas obras generan empleo y liquidez en la economía.
El SPP tiene en fondos un cuarto del PBI, lo que ha permitido que se generen los mecanismos de transmisión descritos arriba. Según el IPE, por cada punto porcentual de crecimiento, 10 % de debe al aporte del SPP. En Chile, en una estimación de Vittorio Corbo, la dinámica de aporte resultó muy similar a la peruana. Incluso, el presidente de Argentina, Javier Milei, evalúa reformar su sistema previsional con una experiencia hibrida ya que mantener un sistema previsional con el Estado es insostenible fiscalmente. Incluso, países desarrollados como EE.UU., China y muchas naciones de Europa tienen una serie de problemas de sostenibilidad fiscal con los efectos demográficos que van a ser cada vez mayores a lo largo del tiempo.
Esta posible reforma estructural le permitiría a Milei reactivar la economía argentina, acorde a lo experimentado para los casos en Perú y Chile. Si Milei lleva a cabo la reforma, llenaría un vacío ante el fracaso de las Administradora de Fondos de Jubilaciones y Pensiones (AFJP) que fueron muy mal influenciadas por los gobiernos peronistas anteriores.
Nuestro SPP no caerá en la experiencia de las extintas AFJP ya que nuestros portafolios están muy bien diversificadas y poco expuestas a riesgo político. En el caso de Argentina, sus administradoras sesgaron su portafolio en bonos soberanos argentinos que se declararon en default con la crisis del “corralito argentino”.
Es importante mantener el SPP, pero hay una serie de retos que deben ser cumplidos para garantizar una pensión justa para el afiliado. Muchos de los retos son tarea del Ministerio de Trabajo y del Poder Ejecutivo. En esta línea está pendiente reducir las altas tasas de informalidad en el país que hacen que nuestra cobertura sea la mitad de la que tienen los pares de la región. Las rigideces del mercado laboral y la falta de iniciativa del ejecutivo impiden que se hagan las reformas en el mercado laboral lo que afecta negativamente al SPP.
La constitución actual protege el ahorro previsional y la propiedad privada. Sin embargo, estamos sujetos a mucha incertidumbre y riesgo político que puede afectar lo avanzado en estas últimas tres décadas, en materia macroeconómica y en especial en los avances en el sistema de pensiones ante una ONP que no puede ofrecer una pensión digna con amplia cobertura. Hoy el gremio de las AFP tiene un nuevo director que viene de Compliance y que recibe al SPP en un marco bastante complicado desde el punto de vista de ruido político ya mencionado.