Estudiantes investigadores

El desarrollar habilidades de investigación en estudiantes universitarios es crucial en la era del conocimiento, pues los prepara para abordar desafíos complejos con pensamiento crítico y soluciones innovadoras. Así mismo, fomenta su curiosidad, la evaluación de evidencias y su capacidad de generar nuevos saberes. Además, promueve la comprensión profunda y el juicio informado. La investigación no solo amplía horizontes, sino que también vincula a los alumnos con actividades de responsabilidad social y los estimula a propiciar cambios positivos en su entorno. Por ello, la universidad debe implementar estrategias que permitan el desarrollo de estudiantes investigadores.

Para lograr este objetivo, algunas estrategias efectivas que venimos desarrollando en la UTP y que pueden ser útiles para alimentar la reflexión sobre el tema son los cursos transversales, el involucramiento de jóvenes talentosos en proyectos de investigación de la universidad y el desarrollo de semilleros estudiantiles.

Los cursos transversales de investigación forman parte de los planes de estudio de todas las carreras. Estos cursos están distribuidos en las diferentes etapas de la formación académica y permiten que los alumnos y alumnas adquieran gradualmente destrezas para la investigación. En la UTP tenemos al menos tres de estos cursos en todas las mallas curriculares. El primero, está ubicado en los ciclos iniciales y permite que los estudiantes puedan desplegar destrezas para la investigación a lo largo de su formación; el segundo, en ciclos superiores, está orientado a la revisión sistemática de la literatura y el tercero, hacia el final de la carrera, se centra en la realización de la tesis para la obtención del título profesional. Como resultado de este proceso, muchos estudiantes desarrollan pasión por distintos fenómenos, publican artículos en revistas indexadas y generan contribuciones intelectuales relevantes para la sociedad y para el desarrollo de sus propias carreras.

Otra estrategia muy útil es el involucramiento de alumnos talentosos en grupos, centros o institutos de investigación dentro de la universidad. Este enfoque les proporciona la oportunidad de trabajar en proyectos con impacto real, junto a docentes investigadores experimentados. Un ejemplo destacado es el trabajo de estudiantes en nuestro Instituto de Energías Renovables en el sur del país donde han contribuido, entre otras cosas, al desarrollo de proyectos que benefician a la pesca artesanal a través del uso de energía solar. Así, por ejemplo, han sido parte de un proyecto que utiliza robots submarinos para identificar dónde se concentran los peces en el mar de Matarani. Otro grupo ha participado en la creación de un mecanismo para la generación de pasta de hielo usando energía que transforma la radiación solar en electricidad, permite el enfriamiento a bordo de la pesca y posibilita que los pescadores puedan pasar más tiempo en el mar, aumentando su productividad. El involucramiento de los estudiantes en diferentes proyectos no solo ha generado publicaciones indexadas, sino que también les ha permitido obtener becas para estudios de maestría en universidades prestigiosas del mundo, demostrando el valor y la aplicación práctica de sus habilidades de investigación tanto para su entorno como para su propio desarrollo profesional.

Finalmente, otra estrategia que viene dando resultados es la implementación de semilleros de investigación. Un semillero de investigación universitario es una comunidad conformada por iniciativa de los estudiantes, bajo la tutela de un asesor de la institución con experiencia en investigación. El semillero realiza actividades extracurriculares en las que propone proyectos que contribuyen significativamente al desarrollo de sus competencias investigativas. Por ejemplo, en un semillero en el norte del país, los alumnos están explorando la capacidad de ciertas plantas para absorber o estabilizar sustancias contaminantes presentes en el suelo o en sedimentos. Sus hallazgos pueden contribuir a solucionar, de una manera sostenible y de bajo costo, un problema significativo en la región y así, obtener suelos más firmes y aptos para construcción. De este modo, la participación de los futuros profesionales en los semilleros los motiva también al conocimiento de la realidad nacional, con énfasis en la problemática regional, contribuyendo así a su formación como ciudadanos responsables.

Desarrollar estudiantes investigadores es esencial para formar individuos competentes, críticos, apasionados por el conocimiento y comprometidos con su entorno. Estas habilidades trascienden las aulas universitarias y se proyectan a la sociedad. Sigamos pensando en estrategias para que nuestras universidades sean las canteras de los profesionales y ciudadanos que nuestro país requiere.