Consejos prácticos para mejorar tu Imagen Personal - (Parte 1)
Investigando un poco más sobre estos temas que son de tanto interés para muchos de nosotros, que se refieren a la gestión de nuestra marca personal e imagen profesional, encontré un interesante artículo de Myriam Rius, que agrupa estos consejos por categoría y me pareció interesante compartirlos y revisarlos junto con ustedes.
La primera categoría agrupa consejos relacionados a la “Presencia Profesional y Aspecto Físico”.
1) Cuida tu aspecto físico.
La imagen corporal, la imagen visual que ofreces, no sólo refuerza la seguridad personal, también fomenta la aceptación social y la confianza a priori. Debes ser, en todo momento, muy consciente de ello.
Esto es muy cierto, sobre todo porque cuando uno se siente a gusto con uno mismo, eso lo transmite a los demás y se percibe muy fácilmente por el resto. Esto no tiene nada que ver con nuestra talla, tamaño, etnia o belleza natural, se refiere al cuidado sobre nuestro aspecto general. Cuanto cuidamos de nosotros mismos.
2) Cuida especialmente los detalles.
Cuidado e higiene personal, pelo, dientes, uñas, aliento… Recuerda que tu aspecto habla de ti antes que tus palabras y, que en este sentido… ¡hasta el más pequeño detalle resulta importante!
En este punto, no hay mucho que decir, totalmente de acuerdo. No queremos ruido en nuestra comunicación. Cosas tan simples comos zapatos sucios, corbatas viejas, uñas mordidas, cabello desordenado, distorsionan nuestra comunicación con nuestros interlocutores.
3) ¡Saca partido de lo que tienes!
No todos hemos sido igualmente privilegiados por la naturaleza, pero incluso las personas menos favorecidas, pueden sacar partido de lo que tienen. Si no encuentras la forma para sacarte el máximo partido, recurre a un profesional. Cada vez hay más y de mayor eficacia y buen servicio.
No estoy muy segura del enfoque de esta frase, pero en conclusión, se refiere a que no hay persona poco agraciada, si no mal arreglada. Aquí no tiene nada que ver la belleza natural. Todos tenemos puntos favorables y hay que tratar de crear un balance o equilibrio visual, para que luego que pasen esos 7 segundo de la primera impresión, lo que sigue, sea que realmente presten atención a lo que tenemos que decir.
4) Indumentaria:
Que sea adecuada a la ocasión. La indumentaria es símbolo de pertenencia (a un grupo social o profesional determinado) y de distinción (estatus). Hay que tener en cuenta que los códigos no son universales, pues varían en función de la época y la localización geográfica. Lo importante es saber vestir de forma adecuada a la ocasión. Si no conoces los códigos: observa y/o pregunta.
Muy cierto! No en todos los entornos laborales los códigos de vestimenta son los mismos y como dice la famosa frase, “a donde fueres, haz lo que vieres”. Y si tienes dudas, no tengas temor a preguntar, sobre todo si recién comienzas un nuevo trabajo, visitas a un un nuevo cliente o es un evento al que no habías asistido antes. A veces es mejor estar “mejor arreglado”, que estar por debajo de la mayoría y recuerda siempre “vístete para el puesto que quieres tener, no para el que tienes”.
5) Evita a los enemigos de la imagen.
Son muy fáciles de identificar: talla inadecuada, prendas o accesorios deteriorados o claramente pasados de moda.
Estos son errores comunes y muchas veces no nos damos cuenta. Es preferible dejar de usar accesorios, si estos van a echar a perder un look limpio y prolijo. Lo de “pasado de moda” no estoy de acuerdo, ya que en términos laborales o profesionales lo de “moda” no se tiene tan en consideración como lo clásico, elegante, sobrío. Puedes adaptar la moda a tu estilo personal con algunos toques, pero definitivamente no es lo primordial.
6) Prepara un guardarropa profesional
Con el objetivo de poder ir siempre vestido de forma adecuada, sin que sufra demasiado tu bolsillo. Sobre todo importante para las mujeres, ya que son ellas las que pueden lucir mayor variedad en su indumentaria. Es importante disponer de prendas básicas (que se quedarán en el armario varias temporadas), combinadas con accesorios y prendas de moda.
De esto hemos hablado en varias oportunidades. Lo primero que todos debemos hacer es armar un guardarropa básico para ambas temporadas (otoño/invierno y primavera/verano) con prendas básicas, de muy buena calidad, que podrás utilizar en varias ocasiones y que sean combinables entre sí. Esos son los infaltables!
7) No olvides que tus cosas también hablan de ti.
Tu coche, lapicero, papel en el que se toman notas… Todas esas “herramientas” profesionales, hablan de la competencia profesional de su dueño antes de que éste pronuncie una sola palabra. Otro ejemplo, ¿quien merecería tu confianza como fotógrafo, alguien que usa equipo de iluminación, cámara profesional y trípode o alguien que fotografía con una cámara compacta? Recuerda que las cosas que utilizas como profesional, también hablan mucho de ti: “Asegúrate que dicen lo que quieres que digan” (Andrés Pérez Ortega, Marca Personal).
Aunque durante mucho tiempo me resistí a creer en este punto, es cierto que también influyen. Es más sencillo de comprenderlo si nos ponemos del otro lado. Si fueras tu a elegir a un profesional para que te brinde un servicio o realice un trabajo (independientemente de la marca de sus “herramientas”) entenderías que sin saber mucho de él, se preocupa por dar lo mejor a través de lo que utiliza para realizar su trabajo, no sólo con un objetivo de “status”, sino justamente para ofrecerte un mejor servicio? Consciente o inconscientemente eso te va a influenciar en la toma de tu decisión.
8) Prepara un Elevador Speech.
Tener preparado un discurso breve y conciso que exprese de forma ágil y amable quién eres, qué haces (e incluso qué buscas, deseas o vendes) facilitará enormemente que completes la imagen que estás proyectando a través de tu aspecto visual. Tienes que ser capaz de adaptar este discurso a tu interlocutor y al momento concreto en que tengas oportunidad de pronunciarlo.
Este punto también es muy importante. Cuando tenemos un punto de contacto con un cliente, prospecto, etc., no tenemos mucho tiempo para que nos conozcan, así que tener ya un “discurso” listo, que sea claro, coherente, con un hilo conductor y honesto, para decirlo en el momento adecuado, será de mucha utilidad!
9) Tarjetas de visita.
También hablan de ti, y no sólo eso, te permiten facilitar tus datos de contacto para ser localizado en el futuro. Acostúmbrate a llevarlas siempre contigo. Pero, no abuses, no las ofrezcas “a diestro y siniestro”. Entrégalas cuando otra persona te entregue la suya, o sólo si detectas que tu interlocutor desea mantener el contacto
Si trabajas para una empresa, de lo único que tienes que preocuparte, es que estén en excelente estado. Si eres independiente, busca que tu tarjeta deje recordación, para cuando piensen en ti, el aspecto de tu tarjeta haya causado un buen impacto.
Próximamente volveremos con otros Consejos Prácticos, mientras tanto, ¿qué opinan de este grupo? ¿están de acuerdo? ¿agregarían algún consejo más?
Fuente: Reinventa tu negocio, Myriam Rius