6 causas por las que tus buenos empleados se van
A veces hay empresas que podrían llegar a ser exitosas pero que, sin embargo, por culpa de sus fundadores o directores, acaban siendo un fracaso por no tratar bien en los trabajadores.
¿Cuántas veces te has sentido que tu jefe no te ha recompensado por el esfuerzo que has hecho quedándote más horas de las que debías? ¿Cuántas veces has sentido que han promocionado a la persona equivocada, cuando tú lo merecías más?
Cuando tus mejores empleados abandonan la empresa
Es increíble la cantidad de talento que muchas empresas y start-ups pierden debido a cosas como estas. Los empleados con mejores CV a menudo no son valorados como deberían, hasta el punto en que deciden abandonar el barco y probar suerte en otras compañías.
Es por eso que hoy vamos a recopilar las principales causas que hacen que los buenos trabajadores se marchen.
1. No te dejan seguir tus pasiones
Muchas veces los ‘jefes’ intentan que se hagan las cosas a su manera, o lo que es peor, imponen su manera de hacer las cosas y no dejan que lo hagas a la tuya. Se pone aún más crudo cuando quieren que hagas solo cosas monótonas, no te dejan proponer sugerencias y seguir tus pasiones. Hay casos de estudio como Google, donde los empleados dedican el 20% de su jornada laboral a proyectos personales aplicados a la empresa, de allí han salido proyectos tan exitosos como Gmail, y todas las mejoras y novedades que aplica Google día a día. Parece, pues, que no es buena idea coartar la libertad y la creatividad de los empleados.
2. No te dejan desarrollarte como profesional
Las empresas que no dedican recursos a formar a su personal están condenadas al fracaso. No hace falta que te paguen un máster extremadamente caro, pero a veces hay grandes opciones de formación online que te pueden ayudar a aprender igual o más que uno de pago. La corriente de los MOOC’s que tanto que hablar está dando, puede ser una buena alternativa para empresas con pocos recursos.
3. No te dejan ser creativo
Hay culturas empresariales que están estancadas. Este tipo de mentalidad suele ser típica en empresas que tienen poca rotación de trabajadores, como el sector público. No obstante a veces podemos encontrar este tipo de conductas en empresas jóvenes.
Cuando haces propuestas creativas que pueden dar una ventaja a la empresa, y tu jefe te dice: “Esto es muy moderno para nosotros”, es cuando tienes que replantearte si tu puesto de trabajo es adecuado para tus expectativas, y quizás empezar a buscar otro sitio donde valoren más tus ideas.
4. Te hacen trabajar demasiado y con fechas límite constantes
Estaremos de acuerdo que las fechas límite son importantes, ya que si no se cumplen pueden entorpecer el funcionamiento de toda la empresa, pero hay algunas empresas que llevan está práctica a su máximo exponente. Es probable que hayas escuchado alguna vez: “Esto es para mañana”, y has pensado que no tenía ningún sentido, pues podía esperar unos días más.
5. No te reconocen tu esfuerzo y dedicación
Lo peor para un buen empleado es que no le reconozcan lo bien que hace su trabajo. A veces con una palmadita y una felicitación en público ya es suficiente, para muchos el reconocimiento es un gran factor y hay que saber detectarlo y recompensarlo de manera justa.
Muchos de estos trabajadores dedicados prefieren trabajar en un buen sitio dónde se sientan a gusto, a trabajar en un sitio dónde cobren un poco más pero en peores condiciones. Si no puedes ofrecer más dinero, debes aprender a recompensar a tus empleados de una manera diferente.
6. Contratan a la gente indebida o innecesaria
Quizás ha sido tú caso que estás trabajando en una empresa y de repente, por arte de magia aparece una persona que nadie conoce, colocada por el director de turno, y que entorpece tu faena además de ser poco productivo, quizás incluso ha sido el típico “enchufado”.
Hay que saber contratar con cabeza y no poner a gente conflictiva con gente trabajadora, el resultado de seguro que será un rendimiento bajo por parte de ambas personas, siendo malo para la empresa y repercutiendo negativamente en el buen clima laboral.
Conclusión
Si quieres que tus mejores trabajadores se queden en la empresa, necesitas pensar cómo te gustaría que te trataran a ti. Hay que saber atraer al talento, recompensando tanto como puedas lo mucho que hacen trabajando para tu empresa, porque ninguna empresa triunfaría sin empleados.
El éxito o fracaso está marcado por la retención de las personas clave (top performers). ¿Eres uno de ellos? Si te sientes así, replantéate tu situación y estudia marcharte a un sitio dónde te valoren de manera justa.