Prudencia en la decisión, es lo más importante
Con las nuevas disposiciones del Sistema Privado de Pensiones (SPP) relacionadas al retiro de hasta el 95.5% del fondo a los 65 años y, la posibilidad de disponer de hasta el 25% del fondo para primera vivienda, los afiliados han analizado los beneficios y en algunos casos han tomado acción para usar la disponibilidad del fondo.
Antes de entrar al análisis propiamente, debo resaltar que estos beneficios se pueden aplicar solo en el SPP porque el fundamento básico es que “cada individuo es propietario de su fondo”, a diferencia del Sistema Nacional de Pensiones (SNP) en donde el fondo es colectivo. Como se sabe, en el SPP cada trabajador es propietario del fondo, por lo tanto, tiene identificado claramente el monto total y la posible disponibilidad del mismo.
En caso el afiliado decida obtener el beneficio del retiro del 25% para aplicarlo al primer inmueble, claramente la decisión tiene sentido dado que se traslada una parte de su patrimonio (ahorro en la AFP) a otro patrimonio que es la adquisición de un inmueble; sea como cuota inicial o como amortización del crédito hipotecario. Pero, ¿cómo impacta este retiro a mi futuro?
Imaginemos un afiliado que tiene 35 años de edad y que en su AFP tiene ahorrado S/. 81,000. Luego de analizar los pro y contras, este afiliado hace uso del 25% del fondo para su primera vivienda, por lo tanto, el saldo del afiliado pasa a ser S/. 60,750.
En esta situación y suponiendo que afiliado mantiene su remuneración promedio, continúa trabajando sin parar hasta los 65 años (la mejor situación del mundo), el ahorro del afiliado o la pensión a los 65 años se reduce en 15%. Pero como el mundo no es tan perfecto, la reducción llega al 35% para el trabajador peruano promedio, que solo trabaja 50% de su época laboral.
Por otro lado, analicemos el caso en que al afiliado le va mejor en el trabajo, es decir, aumenta su sueldo y se mantiene como trabajador dependiente con mayor frecuencia que antes, entonces la reducción del fondo a los 65 años es menor al 15%. En el otro lado de la moneda, es decir, la remuneración promedio disminuye en los siguientes años y/o la permanencia en trabajos es menor, en este caso, la consecuencia es que la reducción se acentúa a cifras sorprendentes según sea peor el escenario.
Por ello, la evaluación de usar hoy parte del fondo en lugar de mañana debe ser tomada conscientemente en función a las posibilidades y prioridades personales y familiares. A quienes les va mejor, recuperarán a futuro parte del efecto del retiro del 25%, a quienes no les va bien en los años siguiente, la reducción en el fondo será mayor.
Independientemente de este análisis, aportar al SPP sigue ofreciendo beneficios, no solo para los trabajadores dependientes sino también para los independientes quienes deben evaluar desde ahora empezar a ahorrar para una propiedad y para su jubilación, pero sobretodo, es beneficioso para los jóvenes quienes pueden obtener el mejor impacto, por lo tanto, el sistema previsional debe decidirse con una visión de futuro, pero sobretodo bien informado.
Por: Gonzalo Bernal, gerente comercial.