Vino de Familia
Nunca encontraremos nada más importante para un viticultor que sus parras, su tierra, el olor de su amanecer, que ya de niño captó y hoy de grande las convierte en notas vínicas en nuestras vidas, en nuestras mesas.
El enólogo recorre sus tierras y habla con ellas, les cuenta sus sueños, sus proyectos, las hace dormir como también les da la bienvenida a un nuevo día. Observando sus brotes, su envero, con la buena poda y mucho amor.
Hoy quiero hablarles del vino de familia del mercado peruano. Es una bodega en especial que muchos compartimos nuestro amor por ella. Sobre todo quiero hablarles del Don Nicanor o como yo le llamo el Padre de Familia. Ingresa al mercado nacional hace más de 11 años. Es un vino argentino de aquellos que no debes dejar de mirar porque alguien te lo gana en una góndola. Es el vino que te da la seguridad de comprar cajas y poderlo beber con orgullo y sin molestias ni quejas, durante reuniones en casa, con amigos o con familia. Solo al escuchar Nieto Senetiner ya me siento parte de algo, de un niño llamado Benjamín Nieto tierno y fresco, o de un Reserva más crecido o del Nicanor ya maduro y potente. Cada categoría de vino de esta bodega nos envuelve con un manto de fruta rica y pulposa que siempre encaja en los paladares más europeos y engreídos del lugar. A ciegas.
La historia de Bodegas Nieto Senetiner de remonta hacia el año 1888, cuando inmigrantes italianos la fundan y siembran los primeros viñedos en Vistalba, Luján de Cuyo, provincia de Mendoza. La bodega se desarrolló en manos de diferentes familias durante las primeras décadas del siglo pasado, que le procuraron la forma arquitectónica al estilo de las campiñas italianas que aún hoy se conservan.
En el año 1969 es adquirida por la familia Nieto y Senetiner, quienes amplían las instalaciones dando comienzo a una nueva etapa de crecimiento y desarrollo de sus marcas, en 1998 pasa a formar parte del Grupo de Negocios de Molinos Río de la Plata. La bodega posee una posición consolidada de liderazgo, comprometida con los más altos estándares de elaboración y calidad, sustentados en un plan continuo de inversiones tanto en fincas como en tecnología de procesos.
Mercado mundial donde entra siempre termina siendo Top Rank en ventas. Las casi 3400 hectáreas llenas de vida y uva.
Filosofía de elaboración del vino
Los viñedos Nieto se gestionan con una intervención mínima para permitir que cada sitio pueda expresar su terruño único. Las uvas son cosechadas a mano, y el viñedo se adhiere a las prácticas de conservación del agua y a una viticultura sostenible. El uso de compost en lugar de fertilizantes, el laboreo del suelo y la extracción manual de malas hierbas en lugar de herbicidas, insecticidas es fantástico. Nos recuerda como Europa cuida y mantiene bajo funciones orgánicas su ambiente y aquí se mantiene esa línea de respeto por la naturaleza.
En la bodega, un enfoque no intervencionista continúa similar, usando levaduras naturales, adiciones mínimas de SO2 y no acidificaciones. La utilización de reciclaje de aguas residuales, conservación de la energía y el compostaje de la piel de las uvas utilizadas.
Todo me habla de higiene, sanidad, pureza, sustentabilidad, compromiso con el medio ambiente.
Ahí es donde nace el Don Nicanor, puedes sentir cuando lo bebes el abrazo de tu padre cuando joven, ese abrazo de calor humano, de ser esa extensión de su ser. Parte de la naturaleza del vino está en lo que nos hace sentir.
12 meses de barrica francesa, flambean esta rica fruta Malbec y la convierten en un fino mordisco de ciruelas morronas. Inmenso, de muy buen precio, un vino que te hace sonreír y te dice que el tiempo no pasa en vano. Una vid de casi 40 años, a más de 1050 mts. sobre el nivel del mar. Luján de Cuyo, zona de nuevas joyas argentinas hoy.
Bébelo a 18 grados y no lo sueltes.
Gracias Drokasa Licores por apostar por grandes marcas