Requisitos para asesorar a una Empresa Familiar
Después de tener ya casi 15 años asesorando a Empresas Familiares, de todo tamaño, y en diversas partes de nuestro país, hemos logrado poder identificar algunas características indispensables con las que deben contar nuestro equipo de trabajo, además de los conocimientos propios de la profesión. Estas características nos permiten brindar soluciones a la medida de cada empresa Familiar y además fomenta el aprendizaje para ambas partes, consultores y miembros de la Empresa Familiar.
- Empatía: cada situación familiar es diversa, cada una cuenta con características propias, irrepetibles en otra familia, cada problema o situación de conflicto requiere la capacidad de poder “ponerse en los zapatos del otro”. Hacer propio el problema, sin perder la objetividad, permite entender y comprender a detalle por lo que está pasando la Empresa Familiar y generar soluciones adecuadas para que la empresa continúe su crecimiento manteniendo a la familia unida y comprometida.
- Discreción: los acontecimientos de una familia pertenecen sólo a sus miembros, ellos comparten con nosotros sus problemas, nos brindan su confianza, en retribución a ello, nuestra discreción en absoluta, por ellos jamás hemos publicado a las familias que hemos asesorado, sus problemas quedan con nosotros.
- Flexibilidad: esta característica es muy importante, ya que existe el riesgo de que los consultores se orienten a aplicar ciertos esquemas ya conocidos tratando de que la Empresa Familiar se adapte a dichos esquemas, sin embargo, en nuestra opinión el proceso debe ser a la inversa, nosotros ponemos en primer lugar a situación de la Empresa Familiar y adaptamos los esquemas en uso o innovamos para poder darle una solución a la medida.
- Paciencia y capacidad de escucha: un buen consultor sabe escuchar, sabe preguntar, pero sobretodo debe tener la capacidad de transmitir al otro su conocimiento y su experiencia para que puedan ser de ayuda. Para eso se requiere paciencia, escuchar con detenimiento las inquietudes, las historias familiares, las versiones y posiciones distintas en los conflictos. Se requiere repetir una idea importante una, dos, tres o las veces que sean necesarias, se requiere ejemplificar, poner en un lenguaje sencillo y cotidiano soluciones y propuestas de mejora.
Nuestra experiencia nos muestra que los miembros de un equipo de Consultores de Empresas Familiares, además de conocer bien de negocio deben comprender la complejidad de una familia, la cual aumenta al dirigir una empresa, por ello las características mencionadas son vitales para poder dar solución a sus problemas.