Los nuevos Atahualpa y Huáscar (Cajamarca y Cusco)

Los resultados de las recientes elecciones han posicionado y reafirmado liderazgos y fortalezas regionales, así como antagonismos históricos, uno de ellos con más de 500 años de antigüedad, si nos remontamos al Tahuantinsuyo cuando tenía dos liderazgos uno en el sur con base en Cusco (Huáscar) y otro en el norte con base en Quito y Cajamarca (Atahualpa).

Hoy tenemos un líder en la sierra norte que ha logrado más del 40% de los votos válidos en Cajamarca, que es Gregorio Santos y en la sierra sur otra gran lideresa que también ha logrado casi la mitad de los votos válidos en Cusco, que es Veronika Mendoza.

Por contrapartida, una de las regiones donde obtuvo porcentualmente menos votos Veronika Mendoza fue Cajamarca y Gregorio Santos obtuvo menos del 5% en Cusco.

En la primera vuelta electoral del 2011 Cusco y Cajamarca también tuvieron preferencias distintas, en Cajamarca lidero Keiko Fujimori y en Cusco Ollanta Humala, obtuvo una gran votación.

En general Cajamarca votó más por el partido fujimorista y Cusco ha sido tradicionalmente anti fujimorista.

Esta diferencia viene de siglos atrás tal como comentaba, José Carlos Requena, redactor del Diario El Comercio, quien escribía hace un par de meses: “Apoyada en la revisión de numerosas crónicas, Rostworowski decía que Atahualpa –que había establecido su base en Quito después de pasar muchos años en la zona norte peleando por la expansión del imperio – inició una rebelión contra Huáscar, quien permanecía en Cusco, y contaba con el apoyo de los nobles y la clase dirigente. Norte y sur enfrentados, con Cajamarca y Cusco como lugares claves”.

Además de los liderazgos de Gregorio Santos y Veronika Mendoza, que por edad tienen para muchos años más en política y seguro serán grandes animadores de las próximas elecciones, hay que sumar la opción de César Acuña, cuyo partido logró sin tener candidato a la presidencial ser la cuarta fuerza política con mayor representación en el congreso, Richard Acuña hijo del presidente del partido, logró más de 90,000 votos en La Libertad, siendo el candidato más votado de provincias, consiguiendo más del doble de votos que los candidatos con mayor votación de cualquier departamento del país.

El casi millón de votos obtenidos por Alianza para el Progreso en la elección congresal supera la votación obtenida por el expresidente Alan García, como candidato presidencial.

Acuña, curiosamente nació también, como Gregorio Santos, en Cajamarca, pero ha constituido como su bastión electoral el departamento de La Libertad.

Los tres líderes regionales representan a un sector de población que anhela un cambio en el modelo de gestión gubernamental que han ofrecido los últimos gobiernos y tienen un origen provinciano contestatario del centralismo limeño, tienen futuro político pero para evitar lo que paso hace 500 años, con Huáscar y Atahualpa, cuando por diferencias irreconciliables se debilitaron y terminaron eliminándose entre ellos facilitando la conquista de los españoles; deben encontrar similitudes en sus propuestas, fortalecer sus equipos de trabajo y presentar programas integrados que permitan que tenga mejores resultados y sean un opción electoral con mayor opción.

La gestión que realice el próximo gobierno tendrá mucha influencia en el mayor o menor crecimiento de estas opciones regionales, una mirada más profunda a las necesidades de cada región permitirá identificar los requerimientos reales que desde el balcón de la plaza de armas de Lima no se identifican.