Conociendo los mercados: calidad de servicio para provincias y ciudades
Transcurre el tiempo y el desarrollo del sector de centros comerciales continúa, lo cual es una buena noticia. A pesar de todos los problemas externos, que hacen complicadas las inversiones en estos formatos, ésta no para. Uno espera que al inversionista se le aplauda, agradezca, o por lo menos se le haga el proceso de inversión más sencillo, por el riesgo que asumen, pero nuestra realidad es inversa, en muchos casos.
Las inversiones continúan en Lima y también en provincias, y es justamente escribiendo estas líneas y analizando lo que los empresarios del retail, del sector servicios y otro sectores relacionados piensan acerca de las provincias, que comencé a recordar la llegada de MegaPlaza a Lima Norte, cuando a esta zona de la capital aún se le llamaba Cono Norte, término que tuvo un origen claro y que terminó siendo utilizado para generar barreras mentales en muchas personas y empresas.
Hoy, 11 años después de venir trabajando en Lima Norte y analizando el mercado de toda la ciudad, puedo afirmar que el cambio de denominación influyó mucho en lo que hoy sucede a nivel comercial en esta zona.
Recuerde que lo que se vende en desarrollos comerciales son proyectos, y el entusiasmo muchas veces depende de la ubicación del proyecto.
¿Deberíamos entonces pensar en proyectos y utilizar otras denominaciones? Creería que sí, porqué no pensar por ejemplo en capital y ciudades del Perú. Hablar de una ciudad suena y tiene más consistencia que utilizar el término provincia a secas. Si a la ciudad le agregamos denominación de tamaño y además ubicación geográfica, norte, centro, sur, además de Costa, Oriente, etc., estaremos sintiendo que hablamos de ubicaciones con una mejor percepción comercial.
Adicionalmente, considero que sería muy útil para quebrar el paradigma de las calidades, pues hay quienes aún dudan respecto a que todos los mercados aprecian la calidad, pensar que la calidad es un valor apreciado tanto en ciudades grandes como pequeñas, los consumidores la valoran por igual y premian con su preferencia.
Para ilustrar lo mencionado líneas arriba puedo comentar que he escuchado en cursos y he leído en correos electrónicos, a ejecutivos de diversos niveles, discutir sobre la calidad de lo que debe entregarse, como producto o servicio, cuando se piensa en mercados que no son Lima. Las frase recurrente en estos diálogos es: no, es que esto es para provincia, tratando aparentemente de justificar ahorros en atender como se debe a su mercado, por lo que, con certeza, terminarán recibiendo una respuesta negativa por parte del consumidor. Lo que agrava más estas situaciones es el desconocimiento, físico de lo que la ciudad es en realidad, al margen de las estadísticas. Hay dos posibilidades, o no invertir o invertir cometiendo errores, sea de la magnitud que sea la inversión.
Pensemos en las denominaciones, útiles para quienes están en el mercado local, y también para quienes vienen del exterior a invertir. Facilitemos la comprensión de los mercados, todos serán beneficiados y lo agradecerán.
¿Los cambios en las denominaciones tienen un efecto positivo?, usted qué opina?, tiene algún ejemplo que desee compartir?