Fiorella Ruiz del Campo: "Todas las cosas que se hacen con amor, se hacen bien"

Conocí a Fiorella en mi clase de Comportamiento Humano Organizacional en la universidad. Ese fue el único curso que llevamos juntas porque ella estudiaba derecho y además venía de otra universidad. Al paso del tiempo  y con todas las vueltas que da la vida, ella regresó a la universidad de donde había migrado en un inicio, y conseguimos encontrar las maneras de seguir en contacto. Fiorella preguntaba muchísimo en las clases, siempre llegaba tarde y por lo general lograba convencer a nuestra entonces profesora de todos sus argumentos. Esta vez la entrevisto porque hay cosas fuera de lo académico que me han hecho reflexionar y aprender lecciones  importantes a través de su experiencia. Por eso y porque es en definitiva un Millennial, la entrevisté en la terraza de Dédalo en Barranco hace unos días.. ¡Presten atención a su historia!

Fiorella Ruiz del Campo es abogada. Se ha titulado hace tres meses en la Universidad de Lima con el honor Magna Cum Laude y  trabaja en uno de los estudios de abogados de mayor prestigio en la ciudad (Philippi Prietocarrizosa Ferrero DU & Uría). Detrás de la impecable línea con la que la presento se halla un sin fin de historias asociadas a los hábitos saludables, las ganas de encontrarle pasión a su profesión y todo lo que un joven espera de la promesa de la vida.

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Soy una persona con bastantes matices, suelo ser muy seria en temas de trabajo pero fuera de eso me gusta jugar. Soy  emotiva, me emociono con varias y pequeñas cosas; diría que también soy cariñosa y pasional con lo que me interesa verdaderamente. Y claro, soy abogada.

¿Cómo equilibras tu ser pasional con el ser abogada?

Una cosa que me dijeron en mi primera clase de derecho civil I fue que si no te sientes apasionado por el derecho, no deberías ser abogado. El derecho nace de la retórica, Umberto Eco dice que la retórica es el arte de decir algo que quizás no sabes si está correcto pero que suene a verdad. (parafraseando claro..).

Uno tiene que tener mucha pasión en el derecho para entrar realmente. Yo por ejemplo veo financiamientos, y alguien podría pensar que esto es aburrido; pero en verdad levantarte todas las mañanas a hacer algo que no te gusta debe ser imposible. Sentir pasión por las cosas que haces te hace una persona metódica.

Es por eso que creo que todas las cosas que se hacen por amor, se hacen bien.

¿Siempre supiste que derecho era lo tuyo? 

En verdad yo siempre quise estudiar medicina y luego me di cuenta que era pésima en ciencias. De ahí quise ser chef, quise aprender a diseñar carros y varias otras cosas que me permitían jugar mis tiempos. Yo era una persona desordenada, y ese tipo de carreras requiere mucho de disciplina personal. Entonces decidí escoger derecho, aunque en realidad ¡lo académico no era mi fuerte!

No eras buena en el colegio.. pero ¡eres demasiado buena en lo que haces ahora!

A ver, sí. Estuve primero en la Universidad de Lima, luego me fui a la Pacífico y luego volví a la de Lima.

Ajá…

Es que la Pacífico tiene muchas Matemáticas, y yo y las mates, no… no somos uno.

¿Cómo reaccionó tu familia con tantos cambios?

Yo creo que fue algo poco común pero creo que fue necesario porque al final todas estas cosas que pasan en nuestras vidas son por algo. Quizás hay gente que me puede decir que perdí dos años, pero yo invertí dos años; porque salí mucho más madura de la universidad. Tuve esos dos años en la Pacífico y pude mezclarme con gente de otras carreras (economía, contabilidad, ingenería).

Digamos que solo llevé un curso de derecho, los otros cursos fueron de otras carreras porque era la base y estaba empezando.

Claro, ¿Realmente sentiste ese “plus”  en algún momento?

Si, porque cuando entré a practicar lo primero que vi fue derecho societario y en la de Lima aún no había llevado ese curso pero digamos que mi curso de introducción a los negocios me hizo ver todo más claro.

Todo en esta vida te sirve. Hasta el proyecto de 5to grado de primaria, sirve.

Siempre me decías que prefieres trabajar a estudiar,

Tienes estos saltos académicos y contando todo ¿en cuánto tiempo terminas la carrera de derecho?

En 8 años. Seis en la de Lima y 2 en la Pacífico

Ajá.

Uno puede caer de casualidad en lo que le gusta o puede saber siempre lo que le gusta y hacerlo. En mi caso, quería ver el derecho desde un lado más administrativo pero con un toque legal. Un abogado también puede ser administrador pero no viceversa.

En el tiempo me fui enamorando más del derecho y luego al caer en societario vi más el tema de empresas. Tiempo después empecé a ver M&A (merge and acquisitions), estuve en un estudio de abogados, en dos consultoras, y luego en el estudio en el que estoy ahora que veo financiamiento.

En especial financiamiento de proyectos de infraestructura.

¿Cómo crees que se aborda el tema de la ética al ser abogada?

Creo que es sumamente importante. Y las prácticas anti-éticas terminan saliendo muy caro.

Hay un tema en el sistema, que a veces puedes ser muy buen abogado pero el sistema no te deja avanzar. Al final los buenos abogados de las buenas universidades no salen a ser jueces…

¿Es un tema de incentivos económicos no?

No lo creo. El otro día un amigo me hablaba  de eso justamente. Él no es feliz con las cosas que hace porque su finalidad era hacer plata, y felizmente no es mi caso.

Yo prefiero estar “estresada” en un trabajo que me gusta pero estar 10 minutos en algo que detesto.

Recuerdo que tuviste una experiencia internacional. ¿de qué trató?

Sí. Estudié un curso en Oxford y otro en Cambridge, uno era “UK and english contract on business law” y el otro para un certificado de ingles jurídico (respectivamente). Era básicamente porque uno tiene que encontrar una forma de aterrizar en un mismo punto versiones de partes en países distintos, que creen que están hablando de lo mismo, pero no. Es sobre todo por diferencias culturales.

Yo siempre digo que en Perú las universidades deberían tener un curso de derecho anglosajón básico. Un abogado es un negociador, y debe tener clara las exigencias culturales de sus clientes.

¿Sientes respaldo al pertenecer a un estudio de abogados internacional?

Cuando trabajaba en Price no veía temas tan grandes, pero muchas veces no hay tanto equipo legal. Mientras que cuando estás en un estudio con un montón de experiencia, se pueden abarcar mejor todos los puntos de un deal, y sus posibles contingencias.

Yo creo que en la especialización está el secreto.

¿Es curioso que no te hayas llevado bien con las matemáticas y que ahora te vayas a especializar en financiamiento, no?

Es verdad, pero el tema comercial lo ve el banco. Nosotros nos encargamos de revisar que no tengan demasiados liabilities y que todo quede en orden para el futuro del proyecto.

Fio, desde que te conozco, has bajado muchísimo de peso. Es más, te has vuelto flaca y fit.

De hecho sí. Me hice una operación de manga gástrica.

Yo había sido muy flaca en el colegio, luego subí muchísimo en la universidad y luego bajé de peso con la operación. Cambié totalmente mis hábitos, comencé entrenar y me ordené muchísimo la comida. Fue un cambio importante en mi vida. Creas o no, organizarte para llevar comida saludable y encajar los horarios de deporte con el trabajo y la agenda familiar, no es cosa fácil.

Fuera de eso, uno tiene que perder miedo a engordar. Tienes que simplemente querer estar sano, y como consecuencia estarás flaca. Igual, cuando chambeas y lo haces por amor la consecuencia es que ganas plata.

¿Cómo fue al inicio?

Comí sopas y papillas durante 6 semanas. Ahí comencé a leer sobre cosas sanas, nutrición, etc. Fue tomar riendas sobre el asunto e incluso busqué un personal trainer. ¡Llegué a pesar 115 kilos!

¿Cuál es el impacto en tu autoestima luego de este cambio?

Yo me quería bastante estando gordita, felizmente. (risas)

Eso sí,  te lo digo, cuando estás flaca la gente te trata mejor y hasta te empiezan a ver más como competencia. Cuando eres gordita, eres la gordita buena gente y en fin. Son cosas que pasan y que sí he notado.

¿Cuáles son tus hábitos de consumo con tu nueva vida sana? 

Como 5 veces al día siempre, tomo agua todos los días (lo primero es dejar las gaseosas). Lo fines de semana no como sano, vida sin comida no es vida. En las mañanas como omelette, café jugo frutas, frutos secos. Almuerzo pescados con algún carbohidrato.

Nunca fui al nutriocionista, como te digo, lei mucho del tema. He comido paleo, vegano, vegetariano y más, simplemente para ver como era.

Te veo cómoda en tu vida de hoy, estás feliz con tu comida, tu carrera y tu lugar de trabajo. ¿verdad?

Sí. Y yo creo que con el estudio más aún. He caído en el mejor lugar en el que podría estar, la gente es espectacular. Somos un equipo, una familia.

Como abogado, uno se puede quedar hasta la mil horas trabajando, pero en mi estudio no te sientes mal; es como estar en casa pero con varias piezas de arte (risas).

De poder comprar arte, ¿lo harías?

¡Si, claro!