Todo Existe
Soy parte de la tercera generación de una familia enfocada en el comercio de bienes y desde joven mi abuelo y mi padre me enseñaron a trabajar por lo que quería. Han pasado muchos años ya y recuerdo que siempre me dijeron que para crecer hay que hacer “negocio, negocio, negocio”. Pero considero que hoy es necesario cambiar la manera de hacerlos.
El modelo tradicional enfocado en utilidad pura funciona, pero considero que es un modelo que no es sostenible de acuerdo a las tendencias actuales, ya que no moviliza equipos, simplemente los utiliza. Creo que hoy los negocios deben de buscar balance entre la prosperidad, personas y naturaleza. Si queremos trascender necesitamos crear negocios con propósito.
Muchos dicen que la vida laboral es una cosa y la vida personal otra; dos caminos que no se deben mezclar. Confieso que es difícil separar mi vida personal de mi vida laboral y entiendo que lo que quiero ser, se verá reflejado en las empresas en las que participo.
Los que tenemos la oportunidad de liderar equipos humanos, podemos hacer hoy cosas que de alguna manera pueden influenciar el futuro. Esto se potencia si logramos armar equipos que trabajen creyendo en lo que hacen.
Una cosa lleva a otra y cambiar la manera de hacer negocios me llevo a descubrir el concepto de Economía Circular.
¿Economía Circular? Es una combinación de palabras que se usa hoy en el mundo de los negocios verde y que seguramente a muchos no les hace sentido porque no existía en nuestra época de universitarios. En términos simples, la Economía Circular busca que las empresas usen todos los recursos de la mejor manera, incluyendo residuos, minimizando la generación de basura.
Si bien suena lógico, la experiencia me dice que no es tan fácil de implementar, ya que nuestros procesos están diseñados para eliminar y no para reutilizar los residuos que generamos. Nosotros sabemos comprar insumos, convertirlos en algo y botar lo que no nos sirve.
Si queremos hacer Economía Circular en nuestras empresas, tenemos que cambiar el proceso lineal actual y como bien sabemos, siempre es complicado cambiar.
Sin duda, el concepto de Economía Circular es bueno e interesante, pero es difícil de implementar dentro de cualquier empresa, pero una buena manera de aplicarlo es elevarlo a un contexto de colaboración. Tu basura es mi insumo.
Llevar la Economía Circular hacia una Economía Colaborativa hace que sea viable y fácil de implementar ya que no hay cambios radicales dentro del proceso interno de la empresa y los resultados son muy similares.
Hace unos meses pude conectar un restaurante con una empresa de transporte de carga terrestre bajo el sistema de colaboración. ¿Que tiene que ver un negocio con el otro? En realidad, nada, pero los une un residuo y la voluntad de hacer las cosas mejor.
El restaurante descarta aceite después de usarlo en cocina, el cual de ser eliminado de manera incorrecta genera índices de contaminación muy altos. Por otro lado, la empresa de transportes usa diésel como combustible para su flota y genera un gran impacto ambiental. Resulta que el aceite de cocina puede convertirse en combustible mediante un proceso químico que tiene como resultado final un producto que se llama Biodiesel, el cual genera mucho menos emisiones que el diésel que conocemos. La basura de uno es el insumo del otro.
¿Puede un restaurante resolver el problema del aceite usado?, ¿qué tiene que hacer una empresa de transportes para reducir su impacto ambiental? Estoy seguro que ambas tienen la capacidad para encontrar soluciones por su cuenta, pero el costo sería mucho más alto ya que en el proceso descrito líneas arriba, nada se ha inventado, solo se han hecho esfuerzos para lograr trabajar en colaboración.
Hoy tenemos un restaurante que resolvió un problema de manejo de residuos y a un transportista que ha mejorado su impacto en el medio ambiente. Tenemos basura que no es basura, tenemos economía circular o colaborativa.
Este es solo un ejemplo y estoy seguro que si miramos a nuestro alrededor, vamos a encontrar muchos problemas fáciles de solucionar si colaboramos unos con otros. Lo que realmente necesitamos es voluntad para ayudar a plasmar un futuro mejor.
Como ven, todo existe, es cuestión de unir los puntos.
Juan Alberto Wu
Vice Presidente de L+1
jwu@lmas1.org