Los empleos verdes: entre el desafío y la oportunidad
De acuerdo a estimados de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), se podrían crear 24 millones de empleos para el 2030 a nivel mundial, si se desarrollan más negocios y prácticas sostenibles. Según el Foro Económico Mundial serán 395 millones. La diferencia indica lo difícil de proyectar el futuro.
Esto representa una gran oportunidad de crecimiento económico y de reducción de las tasas de desempleo, subempleo y de pobreza que existen particularmente en nuestra región. Es cierto que con la transición energética se perderá cierto tipo de empleos y de profesiones, pero es cierto también que crecerá exponencialmente la demanda por nuevas carreras profesionales y técnicas y especializaciones que generarán un impacto positivo neto en el empleo.
A los cambios drásticos que ya estamos viviendo en las relaciones de trabajo y de consumo, se suma una “Agenda Sostenible” cada vez más presente en América Latina. Sin duda, esta transformación estructural obliga a que áreas como Experiencia del Cliente y Gestión del Talento de las empresas innoven permanentemente.
Algunos analistas sostienen que la “Sostenibilidad” es una moda como otras en la historia económica. Pero es un hecho que las inversiones sostenibles podrían alcanzar los 1.2 billones de dólares a nivel mundial para el 2029 (trillones en inglés) según BlackRock. Al respecto, un estudio conjunto del Pacto Mundial de la ONU y Accenture Strategy señala que el 44% de los CEO’s encuestados esperan alcanzar 0 emisiones en diez años.
Sin duda estas metas, resultado de las políticas públicas aprobadas por ciertos países (aún no llegan aquí, pero llegarán), requieren que las empresas adopten tres acciones fundamentales:
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Accedan a “financiamiento sostenible” o inversiones responsables.
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Adopten procesos de innovación abierta y tecnológica permanentes.
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Contraten a profesionales con formación y expertise en esta temática.
Estas acciones a su vez requieren de colaboradores que dominen estas especialidades. Por dicha razón, en el campo de los Recursos Humanos, Reclutamiento y Gestión del Talento se implementan hoy estrategias de “upskilling” y/o “reskilling” que buscan ofrecer a los colaboradores una formación que les permita optimizar su desempeño, anticipar escenarios y reciclarse profesionalmente.
A nivel mundial el índice de crecimiento de profesionales en sostenibilidad y ESG está creciendo. De hecho, ahora se les llama “empleos verdes”. En América Latina Brasil, México, Ecuador y Argentina lideran estas métricas. En Brasil, por ejemplo, la tasa de crecimiento anual es de 6.7% y se estima que la tendencia seguirá al alza.
Algunas preguntas que deberíamos hacernos todos, desde los padres de familia, estudiantes, profesionales hasta empleadores son ¿Cómo se están formando los profesionales del futuro? ¿Las universidades o institutos nos están preparando adecuadamente? ¿Cuál opción debo elegir?
Comparto respuestas que pueden resultar útiles:
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Ante todo, se debe escoger una “carrera” acorde con nuestro propósito. Luego vendrán las especializaciones. Por ejemplo, la ingeniería podría ser seguida por la especialidad ambiental o de finanzas en materialidad ESG.
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Es imprescindible buscar la formación especializada y continua.
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Es muy rentable para los empleadores y empleados optar por una formación en el mismo ambiente laboral o hacerlo en paralelo.
Como siempre, frente a un cambio tan radical, se habla de un cambio de era. Entonces, tenemos la alternativa de enfrentar lo que nos toca hacer como si se tratase de un inabordable desafío colosal o como si fuera una oportunidad histórica única.
Todo depende del propósito que nos hayamos planteado en la vida.