¿Cuál es nuestra agenda en común con los pueblos indígenas?
Las poblaciones indígenas están conformadas por familias y comunidades que ocupan un determinado territorio y que tienen un sistema de gobernanza autoorganizada por derecho, que les permite un funcionamiento interno a través de instituciones y procesos basados en sus costumbres y tradiciones.
En un mundo de crisis ecológica y de barreras físicas y mentales que nos alejan de la madre tierra, se hace necesario volver a aprender a relacionarnos con la naturaleza, volver a reconectarnos y verla no sólo como entidad que hay que cuidar, respetar y no contaminar, sino de cómo podríamos aportar en su desarrollo. En este punto se hace necesario cooperar y coordinar con los pueblos indígenas, ya que ellos son los principales guardianes de la naturaleza.
Gran parte de los territorios donde están asentados las poblaciones indígenas existen parques naturales, áreas protegidas o que se deberían proteger. Esos territorios nos brindan diversos servicios ecosistémicos que hacen posible la vida en nuestro planeta. En ese marco tenemos corresponsabilidad en la gobernanza de esos territorios. Sin embargo, ¿cómo cooperar, coordinar, trabajar en conjunto o construir valor compartido con actores que no los conocemos? ¿Nos dicen que tienen una visión de desarrollo muy distinta a nosotros?
Lo cierto es que la falla en la coordinación y cooperación, en el entendimiento común, trae consigo muchos problemas: como el narcotráfico en el VRAEM, los grupos criminales, la contaminación por derrame de petróleo por ruptura del oleoducto en el norte o problemas con las comunidades entorno al gas de Camisea en el sur, la deforestación y sabanización de la selva, la pobreza y en general las brechas de desarrollo que nos arrastran a todos al subdesarrollo.
El reto es enorme, si logramos entender, sentir y vivir las tradiciones de las poblaciones indígenas, podremos cruzar ese puente de amistad que está tendido hace cientos de años, pero que lo hemos olvidado. Ya tenemos una agenda en común que es el desarrollo (rehabilitación, regeneración y conservación del ambiente) ahora falta acercarnos, romper esas barreras físicas y mentales que nos mantienen alejados. Existen ejemplos de círculos virtuosos de regeneración social y ambiental liderado desde las empresas y el estado.
Celebremos este 9 de agosto la riqueza de la diversidad cultural, busquemos dar algunos pasos para comprendernos y en conjunto con los pueblos indígenas construir puentes espaciosos hacía derechos básicos como agua, salud, educación, etc.