Y EL OSCAR ES PARA… EL AUMENTO DE LA REMUNERACION MINIMA
El título de este artículo se inspira en la reciente ceremonia del premio Oscar, galardón anual concedido por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas (en inglés: AMPAS; Academy of Motion Picture Arts and Sciences) en reconocimiento a la excelencia de los profesionales en la industria cinematográfica.
Si hacemos un símil con los acontecimientos que ocurren en nuestro país, podemos afirmar que en materia laboral el aumento de la Remuneración Mínima Vital (RMV) constituye una producción digna de un Oscar en el género de ciencia ficción. Y decimos con todas sus letras ciencia ficción pues resulta poco verosímil que en un país cuyo PBI creció 2.5% el 2017, con más del 70% de informalidad laboral y con una inflación de 1.4%, sea el Presidente quien ponga sobre el tapete un incremento. En declaraciones recogidas en el Diario Gestión, PPK señaló que da por hecho un “aumento moderado” de la RMV.
Recordemos que el Presidente, el día de San Valentín (14 de febrero) y sin que nadie se lo pida, al menos públicamente, dispuso que el Ministro de Trabajo, Javier Barreda, convoque al Consejo Nacional de Trabajo (CNT) para evaluar el incremento. Justamente el día de ayer, 6 de marzo, se esperaba el informe técnico de una comisión del CNT sobre la viabilidad del mismo. Sin embargo, no hubo consenso entre los representantes de los empleadores y de los gremios sindicales como se auguraba, y lo adelantaron Roque Benavides (CONFIEP) y Elías Grijalva (CUT),y será el Poder Ejecutivo quien tome la decisión el 15 de marzo. Esto último según lo ha afirmado el Ministro Barreda, previa reunión con ambos representantes.
Resulta importante tener en consideración que el aumento de la RMV no constituye un tema nuevo, pues ya en abril de 2017 se especuló sobre un incremento pero no prosperó. El año 2016 el entonces Ministro Alfonso Grados manifestó que el alza de la RMV debía ocurrir en “el momento en que se logre un mayor crecimiento de la economía nacional”, hecho que no ocurrió el 2017, por lo que tampoco se incrementó y tampoco vemos visos de mejora este 2018.
Entonces, si no hay crecimiento de la economía, ¿se debería subir la RMV? La respuesta se cae de madura.
Toda subida de la RMV debe derivarse de un análisis técnico que se efectúe sin tener las encuestas de popularidad al costado, y evaluando con detenimiento su impacto. Entendemos que el CNT habría dotado de ese insumo al Poder Ejecutivo.
Un interesante estudio del Diario el Comercio (ver informe del 22.02.2018 en www.elcomerciope.) demuestra que un incremento en la RMV beneficiaría potencialmente a 308 mil trabajadores (poco más del 2% de la PEA ocupada a tiempo completo). Se añade que poco más de 100 mil empleos pertenecen a micro o pequeñas empresas y enfrentarían una mayor probabilidad de pasar a la informalidad. Esto es contundente, si sube la valla existirían mayores incentivos para escudarse tras las sombras.
La investigación señalada sentencia que “existe una relación negativa entre el aumento de la RMV y el nivel de empleo formal. Según Céspedes y Sánchez (BCRP-2013), un incremento de 10% de la RMV generaría una caída de 2,5% del empleo formal”. Advirtamos que según el INEI el año 2017 el empleo formal cayó en 2.8% sin aumento de la RMV.
Además, como se manifestó anteriormente, el crecimiento de la economía durante el 2017 fue moderado (2,5%) y mucho menor al esperado a inicios del año pasado (4,0%).
Durante el 2017, indica El Comercio, el empleo total aumentó en 1,9%, lo que equivale a 314 mil puestos de trabajo. Dicho resultado, sin embargo, se compone de una caída del empleo formal de 2,9% (131 mil empleos) junto a un crecimiento del empleo informal de 3,8% (445 mil empleos). Con ello, la informalidad laboral volvió a aumentar en el 2017 y alcanza al 73,3% de los trabajadores.
Inclusive, si recogemos las declaraciones del Presidente, y en caso se ejecute el aumento “moderado”, éste debería considerar como variable a la inflación, la misma que fue de 1.4% en el 2017. Si se considerara el incremento acumulado de los precios desde el año 2016, último aumento de la RMV, este asciende a 4.6%, lo que en cifras, nos dice El Comercio, se traduciría en un incremento de S/40 a la actual RMV. Pero S/ 40 no es atractivo políticamente pues Humala subió la RMV en S/ 100 la última vez. (01.05.2016).
Como nota informativa conviene advertir que los gremios empresariales proponen un incremento cercano a la cifra derivada de la inflación mientras que los sindicales proponen prácticamente duplicar los S/ 850. Vemos que las partes están muy lejos, por lo que el capítulo final de esta producción cinematográfica (el famoso “THE END”) lo pondrá PPK.
Ante ello, formulamos algunos comentarios que recogen nuestro punto de vista:
- No es oportuno el incremento. Las variables mencionadas (alta informalidad, bajo crecimiento del PBI, baja inflación, caída del empleo formal) lo demuestran, aunque su motivación sería política.
- Nadie niega que S/ 850 no alcanza para cubrir la canasta básica, y además no son netos porque aplica el descuento del fondo de pensiones (13%) llevando la cifra a menos de S/ 750 mensuales.
- En caso se ejecute, el monto debería ser cercano al efecto de la inflación.
- Asimismo, debe evaluarse algún plan para otorgar alguna concesión atractiva para que el informal se formalice. Fijar una RMV diferenciada por ejemplo. Su impacto puede empujar al microempresario formal a la informalidad o a que el aumento sea cubierto de manera informal (fuera de planilla). Esto aplica para el pequeño empresario e inclusive el mediano.
- De ir adelante con el aumento, deberían tomarse en cuenta variables objetivas como la productividad, la ya mencionada inflación. como el tamaño de empresa y/o zona geográfica y no fijar un aumento general. No es lo mismo incrementar una determinada cantidad para una gran o mediana empresa que hacerlo para una mype, tampoco genera el mismo impacto si la empresa opera en Huancavelica, Ayacucho o en la Selva peruana.
Aún estamos afrontando un contexto global desafortunado que impacta en nuestra economía, tenemos un país prácticamente detenido por los casos de corrupción, con inversiones trabadas (algo se ha avanzado felizmente aprobando el proyecto de Ley 2408, que reemplazará al Decreto de Urgencia 003), ¿y se va a incrementar la RMV? Nuevamente volvemos al inicio de este artículo, parece ciencia ficción.
Esperamos que se evalúe bien la decisión, de manera técnica y considerando las variables señaladas. Hacemos votos porque el género de esta “producción cinematográfica” no varíe de ciencia ficción a terror.