Disciplina no significa necedad…
Cuando se hace estimaciones sobre el futuro, es claro que lo único cierto es que el futuro es incierto. Resulta que las estimaciones o proyecciones que lanzamos sobre variables en el tiempo, como es el caso del precio de las acciones en Bolsa, normalmente están basadas en supuestos, y cuando estos supuestos no se cumplen, se hace necesario un cambio de rumbo en busca de corregir decisiones o evitar males mayores.
Hasta los primeros días del año en curso nosotros veníamos sosteniendo que el mercado de acciones local estaba muy castigado, había precios muy baratos que ofrecía oportunidades, que aunque no era posible determinar cuando el mercado se daría la vuelta, parecía una buena idea ir tomando posiciones de manera progresiva. Nuestra estrategia sigue sosteniendo que la BVL esta barata, es solo que ahora pienso que seguirá barata por un buen tiempo más.
A la luz de los indicadores que vamos viendo, a la economía local le tomará algún tiempo mas retomar tasas de crecimiento superiores. Un elemento crítico es la confianza del sector privado, y ésta no solo no se ha recuperado sino que ha seguido deteriorándose. Esto posterga decisiones económicas y hace difícil que se cumplan los estimados de crecimiento oficiales. El precio de los activos en Bolsa necesariamente debe reflejar esta coyuntura, a la que se suma factores externos que ya hemos citado en anteriores post. Por todo esto pienso que no veremos recuperación del mercado durante el primer semestre de 2015, y vamos a ver cómo nos va el segundo semestre…
Felizmente el mundo es ancho, aunque no necesariamente ajeno. Por ello la táctica recomendada, si es que aún no lo han hecho, es reducir la exposición a Perú reasignando el patrimonio en los mercados donde las cosas se ven mejor. Gracias Dios por darnos la posibilidad de diversificar. Igual que oportunamente lo propusimos en años anteriores, para este año todavía se espera crecimiento en la renta variable. Específicamente me parece que las oportunidades están principalmente en los mercados desarrollados, por lo que tácticamente sería recomendable sobre ponderar acciones en estos mercados.
La economía de EEUU se sigue consolidando. Los últimos meses muestran un mercado laboral que se viene fortaleciendo, y en línea con ello los indicadores de confianza del consumidor también se han recuperado anticipando con ello mayor dinamismo en el gasto de consumo para los próximos meses. El S&P500 se encuentra en un ciclo alcista que ya lleva 6 años, periodo durante el cual acumula un crecimiento aproximado de 214% desde sus mínimos en 2009. Basados en los niveles actuales de PER para muchos el índice podría estar caro, y seguramente ven con reserva la posibilidad de asignar parte del portafolio en este mercado. Mi hipótesis es que la consolidación de la economía y la solidez que viene mostrando los resultados corporativos le dará soporte a mayores subidas en el precio de las acciones (el 70% de las empresas que forman parte del índice y ya presentaron información financiera superaron la expectativa del mercado). Para maximizar los resultados sugiero ponderar los sectores que en esta fase del ciclo económico tienden a observar un mejor comportamiento. Entre ellos por ejemplo pueden seguir Consumo Discrecional, Tecnología, y por razones distintas factores cíclicos el sector Salud, que también se ve atractivo. Como factor de riesgo siempre tendremos el debate en torno a cuándo finalmente la Reserva Federal incrementará la tasa de referencia. La forma en que la FED maneje este evento determinará la reacción del mercado, aunque lo más probable es que tengamos una corrección, pero no creo que ello determine un cambio en la tendencia. Cabe mencionar que el margen de maniobra que sobre este tema tiene la Reserva Federal, de alguna manera se ha visto reforzado por el efecto que ha tenido sobre la inflación la caída del precio del petróleo, pues al mantener bajas las expectativas inflacionarias, la FED ha podido “tomarse con calma” la decisión final al tiempo que monitoreaba de cerca la evolución del mercado laboral entre otros indicadores. Sin embargo, es necesario notar que este es un efecto temporal y se diluirá poco a poco en los próximos meses.
Otro bloque a tener en cuenta es la zona Euro. Si bien el triunfo del partido izquierdista de Syriza en las elecciones de Enero representa un factor de riesgo y fuente de volatilidad en la región, dada la abierta oposición que siempre mostró este grupo a las políticas del Banco Central Europeo (BCE), el escenario actual es un tanto diferente. Básicamente el hecho que los inversionistas internacionales tengan ahora una menor participación en la deuda griega que cuando se desató la primera crisis de este país, me hace suponer que los efectos de una nueva crisis estarían mayormente focalizados.
En cambio la suma de otros factores como la divergencia de las políticas monetarias de la FED y el BCE que en conjunto tienden a fortalecer el Dólar frente al Euro, representa un efecto positivo para países con una estructura comercial netamente exportadora, como sería el caso de Alemania, e incluso España. Otro factor del que se vienen beneficiando las economías de este bloque y sumará puntos al PBI de la región a través de su efecto sobre la capacidad adquisitiva, y por lo tanto en la demanda, es la caída del precio del petróleo. Ya los últimos meses se ha podido observar mayor dinamismo en las variables relacionadas a consumo como son ventas minoristas. En los próximos meses este comportamiento podría reforzarse de la mano de mejoras que se van observando en el mercado laboral. La Comisión Europea estima que la zona Euro crecería 1.3% en el 2015 y 1.9% en el 2016.
Las políticas expansivas en Japón y la depreciación del Yen frente al Dólar, también apuntan a este mercado con potencial de apreciación para este año. Sus indicadores económicos ya empiezan a mostrar mejorías y su Bolsa viene reflejando las mejores perspectivas de dicha economía.
Para terminar, si bien la táctica que estoy planteando básicamente consiste en un rebalanceo en el que reducimos Perú, y aumentamos exposición a mercados desarrollados, debo hacer hincapié en el timing. La elección del momento para hacer las ventas y las compras es importante para el éxito de la táctica. Tengan en cuenta que el S&P500 nuevamente ha hecho máximos la semana que pasó, lo mismo el STOXX600, el DAX de Alemania y otros índices europeos. Sugiero tener esto muy en cuenta.
También quiero recordarles lo que antes ya he mencionado en otros post. La Táctica busca aprovechar las oportunidades que ofrecen coyunturas específicas, luego de lo cual hay que regresar a la Estrategia. Sigo pensando que la BVL está muy castigada, que hay precios con potencial de apreciación interesante. Es solo que pienso que esa apreciación tomará un tiempo relativamente largo debido entre otros factores a la desaceleración de la economía local, la falta de confianza del sector privado en medio de un gobierno que no aporta ideas para recuperarla, y la cercanía de un proceso electoral que añade incertidumbre en el escenario. Yo sí creo en la gestión activa (no confundir este concepto con especulación), y en ese sentido se vuelve interesante un rebalanceo que asigne los recursos en los mercados con mejores perspectivas. No es falta de patriotismo, es simple racionalidad económica.