¿Qué son los bonos verdes y cómo funcionan?
Justine Ibáñez, alumna de Economía de la Universidad del Pacífico
Vivimos en un mundo en el que los efectos del calentamiento global se evidencian año a año. Se invierten trillones de dólares para poder combatirlo en proyectos como la implementación de un sistema de transporte limpio, manejo de agua, manejo de residuos y promoción del uso de energías renovables, entre otros.
Diferentes campos como la política y la ingeniería buscan hacer frente a los efectos de la crisis climática y el mundo de las finanzas no es ajeno a este problema, pues en la actualidad existen muchos instrumentos financieros con fines medioambientales. Es por eso que los administradores de fondos buscan promover la demanda de opciones sostenibles con la emisión de diversos instrumentos. Sin embargo, los inversionistas son los que se siguen preguntando si es que en verdad estas alternativas son “verdes” como dicen serlo.
La importancia que recae en este tipo de inversiones radica en que el calentamiento global viene afectando diversas partes del mundo, incluso Perú es uno de los países más vulnerables ante el cambio climático, ya que un 46% del territorio nacional se encuentra en condiciones expuestas y vulnerables a este tipo de cambios según la OEFA.
Los bonos verdes son bonos destinados a fomentar la sostenibilidad y apoyar proyectos medioambientales donde el 100% de los recursos son asignados a proyectos con impactos ambientales positivos. Cabe resaltar que los bonos verdes no son lo mismo que los bonos “sostenibles” ya que los primeros son usados con fines ambientales mientras que los otros combinan objetivos sociales y medioambientales. En realidad, existen diferentes tipos de bonos con múltiples propósitos sociales como aquellos que buscan generar impacto y consciencia social o los que buscan ciertas metas de gobierno. El rango de instrumentos que crean consciencia sigue creciendo mientras los inversionistas siguen ganando dinero mientras buscan hacer un bien a la sociedad con sus decisiones de inversión.
¿Qué hacen los bonos verdes en finanzas?
Los ingresos de los bonos verdes pueden destinarse a proyectos nuevos o existentes que tengan efectos ambientales o climáticos positivos. Dentro de eso, el rango es amplio y puede cubrir desde energía, transporte, gestión de residuos, construcción de edificios, agua y mejor uso de la tierra. Algunas definiciones de este tipo de bonos también incluyen comunicaciones y tecnología de la información.
Algunas cifras de los bonos verdes:
Los bonos verdes alcanzaron un récord de $255 billones en el año 2019 superando las expectativas que se tenían a inicios de año. La proyección inicial para 2020 es que la cifra alcance por lo menos $1 trillón en inversiones anuales, según Climate Bonds Initiative’s. En ese sentido, se espera que el mercado siga creciendo incluso en un mundo donde los bonos verdes representan una porción muy pequeña del total de bonos que se transan a nivel mundial.
¿Quiénes compran estos bonos?
El mercado es bastante similar a cómo se hace en el mercado de bonos, donde los inversionistas institucionales (compañías de seguro, fondos de pensiones y administradores de fondos) pueden tener acceso a estos. Desde hace varios años, en algunos países de Europa se exige que los inversionistas tengan en cuenta y se informen de los factores ambientales así como también de los efectos que sus inversiones pueden puedan tener. En ese sentido, la Unión Europea busca fomentar que los administradores de fondos activos que integren los requisitos de sostenibilidad en sus decisiones de inversión.